El geocompuesto esta ensamblado por materiales poliméricos de los cuales, al menos uno de los componentes es un producto geosintético, normalmente georedes y geotextiles y se utilizan como sistemas de drenaje.

La elevada capacidad filtro-drenante que tienen tanto el geocompuesto como el geodren se debe, en el caso del primero, por la estructura de núcleo a base de geored (estructura de dos o tres series de hilos sobrepuestos normalmente de polietileno de alta densidad), y en el caso del geodren por la forma de cono tridimensional. En ambos casos se permite la conducción de líquidos o gases en cualquier dirección y con mínima pendiente.

Ambos materiales incorporan geotextil para envolver al núcleo cuya función es la de filtrar el fluido hasta éste e impedir que se pueda saturar en el futuro y la unión de estos dos diferentes geosintéticos es lo que hace que se le llame geocompuesto y en este caso un geocompuesto para drenar por lo que también se puede catalogar como un geodren.

El geocompuesto es utilizado como un sistema de drenaje en el suelo. Su función es la de evacuar eficientemente un fluido al crear una relación de vacíos mayor que la que éste encuentra dentro del suelo. El núcleo de geored está diseñado para soportar cargas de presión de tierra sin que por ello se vea afectada su capacidad drenante. En muros de concreto o mampostería, el geocompuesto,  sustituye a los tradicionales drenes de grava adosados a la pared, así mismo resultan sumamente eficientes para aliviar presiones hidrostáticas en muros estructurados con geomalla. Permite notables ahorros en costos de almacenamiento y colocación de materiales.